Cualquiera que lleve un tiempo de diseñador freelance habrá tenido el disgusto de trabajar y lidiar con alguno de estos clientes. No son la mayoría, como en cualquier otro ámbito de la vida, hay clientes honestos, educados y respetuosos.
De los que aquí hablamos se les podría calificar de trolls, trabajar para ellos puede mermar tu salud.
Si los identificas antes de empezar aún tienes 2 opciones:
- di no, rechaza el proyecto,
- establece un contrato lo más detallado posible y ponle un extra de sufrimiento al presupuesto.
Si has decidido trabajar para ellos, buena suerte e intenta acabar lo mejor y antes posible la relación.
Clasificación de clientes
La clasificación no es excluyente, desgraciadamente varias coincidirán pero también las soluciones. Basada en hechos reales y en estos artículos (1, 2, 3, 4)
1.- No sé lo que quiero
Cambia de opinión ahora sí ahora también.
¿Solución? cobrarle dichos cambios
2.- Eso también estaba incluido ¿no?
Va incluyendo cosas a medida que avanza el proyecto.
¿Solución? Blindar las especificaciones en un contrato y cobrar los extras.
3.- Lo necesito para ayer
El tiempo para él es más que relativo
¿Solución? Fijar plazos antes de empezar.
4.- Sabelotodo
Sabe de diseño y de todo más que tú y que nadie.
¿Solución? Que lo haga él
5.- Indiferente
Le da igual cómo lo hagas, no te da ningún feedback voluntariamente.
¿Solución? Pedirle confirmación por hitos.
6.- Caprichoso
Te pide 200 bocetos, propuestas y demos y demás.
¿Solución? Establece número máximo y fija en contrato el uso de eso bocetos para que no los pueda reutilizar.
7.- Eso se hace en 5 minutos
Piensa que tenemos esta versión de Photoshop
¿Solución? Fijar plazos antes de empezar, a más corto plazo mayor el presupuesto.
8.- Ajusta porque la cosa está muy malita
La conversación empieza “la cosa está muy mal” y sigue “este sería el comienzo de una relación larga”, es el único afectado por la crisis y te está haciendo un favor dándote trabajo.
¿Solución? Prométele un descuento en el 2º trabajo que te solicite y cóbrale un alto porcentaje por adelantado.
9.- El infinito
Eterniza el proyecto, nunca se da por finalizado.
¿Solución? Fija plazo de entrega y de abono del 100% de la factura en dicha fecha.
10.- Descontento
No sabe lo que quiere pero nunca es lo que tú le propones.
¿Solución? Establece número máximo de cambios y hazle dejar por escrito sus peticiones.
11.- El pesado
No sabe que existen horarios, fines de semana, noches, utiliza incluso el whatsapp para comunicarse constantemente contigo
¿Solución? Comunícale tu horario y calendario de trabajo y nunca jamás le respondas fuera del mismo.
12.- El quisquilloso
No le gusta el píxel (244,120) pero no sabe explicar porqué.
¿Solución? Número máximo de cambios y facilítale el número de un psicólogo.
13.- El reunionitis
Por ignorancia tecnológica o por trauma personal necesita hacerlo todo en dilatadas y vacuas reuniones en su oficina que siempre acaban en “te lo envío por email”
¿Solución? Establece en contrato nº de reuniones, lugar, duración y coste por asistencia.
14.- El desaparecido
Desaparece en medio del proyecto sin previo aviso y a su vuelta quiere cambiar todo lo realizado.
¿Solución? Tomarte tú unas vacaciones.
15.- El moroso
Dice que no puede pagarte el adelanto pero que empieces ya y en cuanto pueda te abona todo.
¿Solución? No mover un dedo hasta que pague.
Actualización 23/07/13 20:44
Como dice el amigo Leopoldo en los comentarios faltaba este:
16.- El asesorado
Tiene un “amigo o familiar que todo lo sabe” (amig@, sobrin@, novi@) que le asesora. “Me ha dicho mi primo que es un crack del Fotochó que…”
¿Solución? Que lo haga su primo
Me suenan muchísimos los puntos del 1 al 15.
Lo que me he reído es para alegrar varios días.
Hasta de esto nos podemos reír ;)
Este post también se podría llamar el club de los abusivos.
Quizá haga falta mencionar al «amigo que todo lo sabe» (amig@,herman@, novi@) que decide «asesorar» asesorar a tu cliente. Tengo una clienta con una hija así.
Saludos a todos los sufridos colegas
Cierto Leopoldo, falta el «asesorado» -> «me ha dicho mi sobrino que es un crack del Fotochó…» jajaja
Actualizado con tu aportación Leopoldo, gracias de nuevo ;)
Jajaja tremendo, y estoy de acuerdo con Leopoldo.
Saludos!
Conocer a los clientes es algo fundamental para saber de qué forma tratarlos y así poder persuadirlos con mayor facilidad.
Muy buenos todos jajaja a mas de uno nos trajo recuerdos, y a la ves es bueno identificarlos para batallar lo menos posible :)
Magnifico post. Digno de ser impreso (solo cosas importantes) y colgar al lado del monitor.
Yo tengo uno que es como 14 «El desaparecido» pero lo llamo el «El ausente» porque va y viene. Cuando viene o espera tener cosas que depende de el (claves de acesso a un tercero) o quiere cambiar todo. Lo ideal seria (porque no lo he conseguido) es cobrar por hitos
Un saludo
Gracias Antonio, desgraciadamente también me es familiar ;)
Tienes razón en lo de cobrar por hitos, es una solución sobre todo para proyectos largos.
Saludos