La obsesión por tener lo más grande es condición ridícula intrínseca al ser humano. No me refiero ya a edificios, esculturas, comidas o récords Guinness, hablo de objetos de la vida cotidiana que realmente no necesitan ser tan grandes.
Veamos algunos ejemplos de estos objetos sobredimensionados por aquello del famoso refrán “caballo grande ande o no ande” porque creo que realmente para que cumplan su función el tamaño aquí no importa.
1.- El reloj más grande
Casi 1 kilo de reloj japonés, ¿de verdad necesitamos este armatoste?
2.- Los pechos más grandes
Cirugía estética mediante se crean los pechos, los labios y las nalgas más antinaturales. Los pechos de Beshine en la foto pesan 20 kgs., los mayores del mundo.
3.- La bolsa de pádel o paletero más grande
¿Qué habrá en esas bolsas además de la pala? Todo un misterio
4.- El casino más grande de Europa
EuroVegas Madrid, la prueba de que los políticos se pasan por el forro la opinión pública a lo grande
5.- El libro más gordo
A pesar del ebook todavía existe la querencia a gruesos best-sellers y si es posible con tapa dura.
6.- El tacón más alto
El ser humano aprendió a caminar y por causas ajenas a la razón a algunas mujeres les gusta hacerlo mal desde las alturas.
7.- El coche más grande
4×4 y coches enormes en urbes con poco aparcamiento y encima no de familias numerosas, lógica aplastante.
Y podríamos seguir pero entonces haríamos el post más grande ;)
Actualización 24/07/13
Al final he caído en mi propia trampa y vamos a añadir unos cuantos más
8.- La nariz más grande
Mi amiga María Abril me ha hecho ver que se me ha pasado uno que por desgracia está de rabiosa actualidad. Una obsesión enfermiza de los políticos.
9.- La cámara de fotos más grande
La cámara no hace al fotógrafo como bien me recordó Leopoldo en los comentarios. A pesar de ello hay quienes por tener la cámara más grande se hacen con el Camarón de la Isla para luego usarla siempre en modo automático.
10.- La celebración más grande
Las bodas y eventos reales y del famoseo son una ostentación a veces costeada en parte por el mismo pueblo. 34 millones de dólares costó la Boda Real entre el Príncipe Guillermo y Kate Middleton. Pero lo que me llama la atención es que sin pertenecer a la alta alcurnia cualquiera convierta un cumpleaños infantil, bautizo o comunión en un verdadero evento «real».
11.- La cuenta corriente más grande
Sea cierto o no que el dinero aunque no da la felicidad ayuda me parece innecesario acumular cuanto más mejor, muchas veces para que al final se lo coman los gusanos mientras que buena parte del mundo no tiene ni lo mínimo. Y si encima es por medios inmorales ni os cuento…
Que tal el ego más grande? :)
jaja, verdad Leopoldo, además hay muchos personajes para ilustrarlo ;)
O quiza más que el ego más grande deberíamos hablar de una autoestima pequeñita acompañada de los recursos financieros para mostrarse como el poseedor de algún bien material que los haga sobresalir.
Saludos
Alguna vez comentaste algo así en Flickr respecto al hecho de que tener una cámara fotográfica cara no por fuerza te convertía en un buen fotografo, sino quizá en un hortera con un hobby/pasatiempo caro.
Efectivamente, la cámara no hace al fotógrafo, este lo voy a añadir ;)