Como hemos venido diciendo la falta de donantes de médula y de cordón umbilical es causa directa de la falta de información.
Os voy a contar a través de la experiencia de mi mujer, Susana, en qué consiste hacerse donante de médula. Adelanto que no puede ser más sencillo.
¿Quién puede donar?
Básicamente cualquier persona sana, entre 18 y 55 años.
Hay quienes piensan que sólo se puede donar médula una vez en la vida y que es mejor guardar ese momento por si un familiar lo necesita. Esto es incierto, las células se recuperan y se puede volver a donar.
Desgraciadamente hace años que me informaron que no podía volver a donar sangre ni por tanto médula por haber residido en Londres 2 años antes de 1996, por el asunto de las vacas locas.
Susana sí podía y así lo hizo.
¿Dónde?
Lo primero es saber dónde ir. En teoría debería ser en cualquier sitio donde se pueda donar sangre, para asegurarte puedes consultar en este enlace o llamar al 900 32 33 34.
A mi me indicaron que sin necesidad de cita previa podía dirigirme al Hospital Virgen Macarena de Sevilla a la Sala de extracciones, donde se dona sangre.
Fuimos, un amigo, Jose, Susana y yo. Jose iba a donar sangre y mi mujer a hacerse donante de médula.
A la llegada al Hospital nos encontramos con dos chicos de la Fundación José Carreras. Al parecer estaban allí casi todas las mañanas, les pedí información pero desgraciadamente no tenían ni idea en qué consistía, estaban recogiendo donativos y a pesar de que entregaban un folleto donde informaban de que uno de los pilares de la Fundación es la promoción de la donación de médula, ellos en la misma puerta del hospital no sabían nada al respecto.
¿Cómo?
Llegamos a la Sala de extracciones y ni un folleto, cartel ni información sobre la donación de médula.
Tuvimos que preguntar y fue entonces cuando el amable Dr. Antonio Guerrero nos dio toda la información que accedió gustosamente a compartirla en este vídeo.
En 2 minutos le explicó a Susana en qué consistía, en 1 firmó algunos papeles y en 5 minutos le extrajeron dos tubitos de sangre.
Luego de la donación fuimos con Jose, que había donado sangre al mismo tiempo, al bar del Hospital a que comiera y bebiera algo para reponerse, a Susana no le hizo falta.
Al parecer no se puede donar sangre y médula el mismo día, hay que dejar pasar unas 48 horas.
Al irnos me detuve con los 2 chicos de la Fundación Carreras y uno de ellos me dijo: “Luego te pinchan en la espalda para donar la médula.” Le expliqué que estaba en un error, que la donación es como nos había explicado el doctor una simple extracción de sangre. El mismo error en el que estábamos muchos antes de informarnos.
Curiosamente al llegar a casa tenía en el buzón el sobre de la Fundación Carreras con toda la información y un DVD que te envían cuando les llamas.
Ya soy donante, ¿y ahora qué?
Una vez que eres donante ya sólo toca esperar a que encuentren alguien compatible al que puedas salvar la vida. Y si esa llamada llega tan sólo tendrás que tomar un medicamento durante un mes y donar una bolsita de tu sangre.
Informar
Hemos comprobado en primera persona esa falta de información. Por ello queremos utilizar las redes para que nadie caiga en el error de que es un proceso peligroso o doloroso.
Organizaremos pronto un día en el que #donamedula se haga Trending Topic en Twitter.
En vuestras manos está difundir esta información a vuestros allegados. Perdonad que os insista pero estamos hablando de la posibilidad de salvar vidas.